Carta de un familiar a la adicción
“Te escribo esta carta, a ti adicción. Para decirte que me has hecho mucho daño a mí y a mi familia, que te odio, que te aborrezco, te detesto, quisiera que no existieras porque también te tengo miedo. Has vivido dentro de mi familia todo el tiempo, primero con mi papá que nos hizo mucho daño y sobre todo a mi mamá que fue la que más sufrió por tu culpa. Tengo mucho coraje hacia ti porque por tu culpa viví los peores días en mi niñez, tenía odiado los días en que papá se alcoholizaba y drogaba, eran un terror para mí, eran días y noches llenos de sufrimientos; lloraba a solas por las noches para que mamá no se diera cuenta y no sufriera más de lo que ya lo hacía, tanto era mi odio hacia ti que de chica me prometí a mí misma que cuando creciera y me casara jamás me iba a casar con un borracho drogadicto y así fue gracias a dios. Pero yo pensaba que con casarme con un hombre sin adicciones ahí se acababa el problema, lo que no sabía es que tú eres tan maldita que no respetas nada ni a nadie y te fueras a meter con alguien tan importante en mi vida que quiero con todo mi corazón, mi hermanito, Javiercito el niño de la casa, que es así como yo lo veía porque todavía era un niño cuando te atreviste a entrar en él, nunca te lo voy a perdonar porque eso sí que me dolió y me duele porque lo dañaste de por vida, porque le has ocasionado mucho daño, dolor y sufrimiento y, por lo tanto, a la familia también.
A causa tuya he pasado tantos desvelos, preocupaciones, miedo de no saber hasta dónde eres capaz de llevar a una persona; a un accidente, pleitos, robos, una sobredosis e incluso la muerte. Todo por tu culpa, porque tú eres cruel y mala, por eso te odio por hacerme tanto daño a mí y a los seres que más quiero, mi familia. Pero fíjate que también te tengo miedo porque tengo hijos y ya sé dé lo que eres capaz, porque lo he visto y he vivido en carne propia, como es que vas acabando poco a poco a quien te prueba. Porque eres engañosa y traicionera, primero le das el control y prometes “ayudar”, “solucionar” y hasta “olvidar”, porque atacas a personas indefensas, con mentes frágiles o que están en alguna dificultad, porque eres tan cobarde que no te metes con personas fuertes que tienen claro sus pensamientos y firmes sus decisiones, porque sabes que te van a rechazar, por eso atacas a los más vulnerables, porque eres una desalmada y cuando ya consigues que te prueben entonces sí, terminas controlándonos, tú los haces tus títeres, que dependan de ti.
Destruyes todo lo que está en tu camino, acabas con las ilusiones y hasta las ganas de vivir de quien te prueba, eres una maldita enfermedad, una desgracia para quien te prueba porque los llevas a un abismo, a un hoyo negro y profundo de mucho sufrimiento y dolor. A, pero lo que tú no sabías es que ya no están solas esas personas que atacas, porque ellos cuentan principalmente con su familia, con casas de vida, done hay personas con conocimientos que los ayudan a librarse de ti y hacerte a un lado para que dejes de hacer tanto daño, nadie dijo que fuera fácil deshacerse de ti porque eres terca y no quieres que te abandonen, pero con mucha fuerza de voluntad, con ayuda de un poder superior, con ayuda de la familia y de personas capacitadas claro que se puede y te van a dejar de lado. Con gusto te digo que Javier está luchando día a día para dejarte, para abandonarte, para recuperar su vida, sus ilusiones, ser una mejor persona y lo va a lograr porque es fuerte y ya es consiente del daño que tú eres capaz de hacer y cuando tú vuelvas a querer entrar en su vida, porque sé que siempre vas a estar ahí esperando la oportunidad, que baje la guardia para atacar él ya va a tener el conocimiento que le va a dar la fortaleza necesaria para decirte que no, que no te quiere de vuelta en su vida, porque está mejor sin ti. Porque él ya no va a estar solo. Y te lo advierto, no te metas con ningún miembro más de mi familia.”